Toyo Ito es un arquitecto japonés, nacido en Seúl (Corea). Considerado uno de los arquitectos más innovadores, trabajó durante 4 años en la oficia de Kiyonori Kikutake Arquitectos y Asociados, más tarde abrió su propia oficina.

El primer proyecto del arquitecto Toyo Ito en América del Sur es White O. El nombre de la vivienda alude a uno de los proyectos más respetados de Ito: White U, diseñada en Tokio, en 1976, para su hermana. "Ambas casas son circulares pero diferentes", explica el arquitecto. "En White U da la impresión de que uno estuviera viviendo en un subterráneo. En cambio, White O está abierta al exterior y pareciera flotar en el espacio".

La vivienda forma parte de la segunda etapa de Ocho al Cubo, un ambicioso proyecto de urbanización en Marbella, donde el hormigón armado es el principal protagonista. Está completamente relacionada con la naturaleza. White O se emplaza suavemente en un terreno orientado al noreste y tiene atractivas vistas en la misma dirección. La propuesta tiene la intención de hacer un uso dinámico de todo el sitio aprovechando las cualidades especiales creadas por la ladera del terreno.

La circulación de la casa es una espiral ascendente, que se inicia en el antejardín, pasa por debajo de los dormitorios, se introduce en los espacios de estar y comedor, y continua ascendiendo hasta llegar a los dormitorios.  Este esquema permitió darle la necesaria privacidad a los dormitorios, al estar levantados con respecto a la calle, como a las áreas de estar de la casa, que se desarrollan atrás, con un juego de medios niveles que le confieren una notable riqueza espacial al proyecto.

Los espacios de servicio están dispuestos en el costado sur de la casa, en dos niveles, y cuentan con cocina, despensa, lavandería y garaje para un automóvil y un carro de golf.  Un acceso exterior de servicio, recorre la casa por el sur, y da acceso a la lavandería en el nivel inferior, y a la cocina, en el nivel superior.

En el lado norte se dispuso una gran terraza, con piscina y barbacoa, y un conjunto de muebles hechos en obra y, por el exterior, en el muro poniente de la casa, se dispuso una escalera de hormigón, con peldaños en voladizo, que permite acceder al techo terraza, desde el cual se tiene un dominio completo de la cancha de golf, los cerros y el mar.